viernes, 26 de marzo de 2021

JUEGOS NOCTURNOS (fotorrelato) por Vivi García

La lechuza Vilma y el gato Ricardito suelen jugar a las escondidas cuando todos los habitantes de la casa más antigua de Floresta se van a dormir. Ella intenta ocultarse detrás de la lechera devenida a maceta, y él desde debajo del vidrio de la mesa grita "piedra libre" una y otra vez. Como Vilma es sorda y a Ricardito, por efecto del cristal, no se le escucha ni miuau, juegan toda la noche sin cambiar de escondite.
A la mañana siguiente, Vilma vuela hasta el árbol del vecino para descansar, y Ricardito duerme sobre el sillón rojo hasta avanzada la tarde.
Cuando el reloj haga sonar las doce campanadas, la noche los estará aguardando entre las hojas carnosas de la suculenta y el asa de porcelana de la lechera inglesa. Los juegos nocturnos de la casona de Floresta siempre le sacan una sonrisa a la luna.
vivitecuenta@gmail.com


No hay comentarios:

Publicar un comentario